¿Que opina la religión sobre la magia, en concreto, sobre cómo es manejada en los siete libros de Harry Potter?
La religión reconoce que existe la magia, más bien la brujería al condenarla rotundamente; por lo tanto, implica que existe. Es obvio que los libros de Harry Potter se basan en la fantasía, pero en tiempos antiguos se manifestaban ciertas prácticas parecidas a las que describen estos libros. En aquellos tiempos, se practicaba la brujería por una parte y por otra parte eran comunes los milagros tácitos utilizando la fuerza de la Cabalá; por ejemplo: equivalente a la parte donde una capa vuelve invisible a Harry Potter, el Maharal de Praga le hizo una “capa” al golem (criatura creada con la fuerza de la Cabalá para proteger a los judíos de los libelos de sangre) para hacerse invisible y de esta forma revelar los agravios que habían hecho contra los judíos, sin que lo descubrieran.
También se menciona que el Baal Shem Tov y otros grandes cabalistas, podían transportarse de forma milagrosa, acortando el camino, traspasando fronteras y paredes (kefitzat haderej).
Para lograr hacer eso llegaron a un nivel espiritual muy elevado.
- Desarrollaron su potencial espiritual dándole fuerza a su alma.
- Se conectaron con el conocimiento profundo de la Torá y la Cabalá, teniendo acceso al conocimiento de la dimensión angelical. Llegaron a utilizar este conocimiento en momentos de necesidad particular y de causas sagradas, no para su conveniencia.
Por otro lado, es claro que la religión rechaza y condena todo tipo de magia, hechicería y brujería.
Referente a Harry Potter en concreto, considero que tuvo cierto impacto porque de alguna manera se demuestra que siempre al final, incluso con magia y brujería, cuando hay buenos principios y buena voluntad, se logran vencer las fuerzas negativas, aunque estas tengan mucho poder, porque siempre D´os impulsará al que con fuerza de voluntad y honestidad quiere hacer el bien, aunque la misión parezca imposible. Personalmente, creo que ese es el verdadero mensaje subliminal que se transmite. Pero obviamente como mencioné anteriormente, la Torá condena absolutamente todo tipo de brujería y magia.